Where Are We Now?
-Estos días se cumple el 25 aniversario de la caída del muro de Berlín… La historia de ese muro siempre me ha impresionado mucho… Recuerdo ver de pequeño las imágenes de la gente picando la piedra en la tele y, poco después, el concierto que se realizó con el montaje del muro de Pink Floyd y Cyndi Lauper cantando el Another Brick in the World vestida de colegiala… :)
Por alguna extraña coincidencia, Berlín está presente estos días en mi vida… Una ciudad que no he pisado, pero que me muero de ganas por hacerlo, y no descarto que finalmente la visite el año que viene, si me lo puedo permitir… Mi primo, que vive allí, ha venido de visita para pasar unos días y ésta vez incluso vamos a cenar todos los primos juntos (algo que no se producía desde hace años)… Bueno, nos faltará una, pero eso es otra historia… Aun así va a ser algo muy especial… Tengo muchas ganas de que nos ponga al día de cómo se vive en esa ciudad hoy…
Pero si de algo quería que quedara constancia sobre este escenario es de los muros… Y de cómo se derriban… Ayer hice algo que años atrás no hubiera imaginado que haría… Cuando pronuncié esas palabras tenía claro que era un momento muy importante para mí… Y que debía hacerlo para dejar atrás algo que ya pesa demasiado… Aún no sé cómo evolucionará todo y sé que, llegado el momento, va a ser una mezcla de emociones de lo más extraña… Sólo espero tener suerte y que con la gente que me va a rodear me sienta reconfortado para mirar adelante y abrir brechas en un muro que dura mucho tiempo… No sé si llegaré a derribarlo; sinceramente, me cuesta… Pero si no puedo hacerlo, al menos esta vez me subiré a lo alto y miraré por encima del borde… Lo que pase después, si me caigo o si lo supero, está por ver…
Mi chamana me decía ayer, ante mi comentario de cómo se estaba moviendo todo estos días, que estaba pasando por una etapa de enraizamiento familiar… Y aunque haya sido mitad casualidad, mitad buscado, creo que es así… Quizás necesito tener mis raíces bien aposentadas para seguir creciendo con más fuerza aún… Espero que todo lo que va a venir ayude… Tengo esperanzas… «Todo irá bien»…
Esta mañana he seguido con mi nuevo ritual de despertarme a las 6:30 para escribir durante una hora… No me cuesta hacerlo, aunque hoy he notado más la falta de sueño, y el avance es escaso (me temo que a esas horas a mi cerebro le cuesta buscar palabras)… Pero madrugar me encanta… Siempre lo he sabido, y me reafirmé durante las semanas que estuvimos en Londres… La luz de primera hora del día, sentir el letargo de la ciudad y escuchar los primeros ruidos tímidos que rompen la noche…
Mientras escribo a esas horas pongo una música muy suave… Y esta mañana (sí, una nueva casualidad) ha sonado esta canción… Berlín de nuevo… Algún día espero pisar también la Potsdamer Platz…
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