So Far Away

[El protagonista espera sentado en un sillón situado en el centro del escenario… Vestido con una camiseta blanca de manga corta, unos tejanos azul marino y sus sempiternas botas negras desatadas, parece estar muy relajado… Disfrutando de la calma… Está sentado descuidadamente casi al límite del sillón, y su cabeza no está apoyada en la parte alta del respaldo, sino a media altura de éste, con el cuello completamente doblado… Si continúa así mucho rato, el dolor de cervicales va a ser inevitable…
En sus manos sostiene una naranja y un cuchillo… El público ya debe conocer que los cítricos no son el fuerte del protagonista (a no ser que sean excepcionalmente dulces y poco ácidos), así que se extrañan y comentan el porque de su cierta actitud de desgana… El protagonista empieza a pelar la naranja con torpeza mientras se dirige a los asistentes… Cualquier intento por conseguir pelarla en una única tira es pura utopía…]

– Bueno… Por lo visto voy a estar algunos días sin poder alzar el telón… Mi máquina de sueños se niega a despertar… Cómo no, eligió el momento más inoportuno para decir adiós… En mitad de la noche y sin previo aviso… Por más que pulso el botón de encendido no quiere obedecerme… Con lo mucho que la quiero y me lo paga de esta forma… :) No me siento cómodo en la que he utilizado hace un rato para escribir este guión… Me falta mi pequeño mundo… Además es algo vieja… Casi va con manivela… Y aunque tiene su encanto, se hace un poco pesado estar ante ella mucho rato… Uno se acostumbra a lo bueno muy fácilmente… :)

[El protagonista deja la piel de la naranja a un lado, sobre las tablas y empieza a cortar los gajos… El zumo de la fruta se escurre por la parte interna de su brazo y el actor en un acto de dudosa delicadeza, lo lame desde el codo hasta la muñeca… Luego mira de reojo a los asistentes y continúa con la función…]

– Perdonad… Nunca se me va a dar bien esto… :) Es curioso lo que puede llegar a hacer uno cuando se aleja de estos trastos con lucecitas… Debo reconocer que paso demasiado tiempo pegado a ellos y que realmente no debería hacerlo… Supongo que el destino me ha puesto este palo en la rueda de la bici para que me dé cuenta de ello… :) Entre muchas otras cosas hoy he dormido mucho… Diría que demasiado… Me he levantado para ir a comprar los periódicos… Los he leído detenidamente mientras esperaba a que mi hermano se levantara… Hemos ido a comer a un McDonalds (y me he vuelto a dar cuenta de que, aunque no sea un asiduo, pidas la que pidas, todas las hamburguesas saben igual)… Luego al cine para ver Bowling for Columbine (los americanos están todos locos con sus pistolitas)… Al llegar a casa he vuelto a escuchar el Songs for the Deaf de Queens of the Stone Age que me compré, ayer tendido en la cama, sin nada que me distrajera (hacía muchísimo tiempo que no experimentaba ese ritual de nuevo)… Más tarde he estado leyendo algunos capítulos del Coraline de Neil Gaiman (estoy a punto de acabarlo)… Y fijaos… Hasta estoy comiendo una naranja… :)
Siento comentaros de una forma tan poco «original» un día sin mi particular caja de sueños… Pero la verdad es que me ha sorprendido a mí mismo cómo el tiempo parece aprovecharse mucho mejor estando algo lejos de pantallas… Ha sido un día que debería contabilizar por toda una semana de los otros…

[El protagonista se pone en pie tras acabar con la naranja…]

– Hasta nueva orden no podré contestar ninguna nota que me dejéis en el buzón… A no ser que lo hagáis a este… Siento las molestias… Soy el primero que voy a echar de menos estar por aquí… Espero que no sea nada grave y pueda estar de vuelta pronto… Realmente no creo que lo sea… Tengo ya mis sospechas de la causa del mal… Mientras, cuidaos y sed buenos…

[El actor se despide con una sonrisa y se retira sacudiéndose las manos y manteniéndolas algo alejadas del cuerpo… Este sería un mal momento para saludar a alguien con un apretón de manos… :)]