When You Wish Upon A Star(o la triste balada de Jason Becker)

enero 27th, 2002

– Me encantan los cuentos. Y hoy, ya que os habéis tomado toda la sopa y os habéis portado bien, os voy a contar uno. Os voy a contar la historia de un niño que se llamaba Jason Becker y de cómo sus sueños se hicieron realidad un día. Hoy la función va a ser un poco más larga de lo habitual, pero si permanecéis callados, al final os daré galletas y un tazón de chocolate caliente…

El actor principal, sentado en un taburete en medio del escenario y enfocado por un único y potente foco, saca un gran tomo polvoriento y de hojas amarillentas en cuya cubierta puede leerse en letras doradas “De Cómo Algunos Sueños Se Cumplen y Luego Se Rompen En Mil Pedazos Acabando Todo en un Final Feliz”. Busca en sus últimas páginas y continúa:

– Jason Becker nació un día de 1969 en San Francisco (Estados Unidos), y desde muy pequeño quiso ser un héroe de la guitarra. Su padre (guitarrista clásico) y uno de sus tíos (guitarrista de blues) tuvieron algo de culpa. Pero ya en el colegio empezó a destacar en el dominio de la guitarra y poco a poco sus pequeños dedos trasteaban las cuerdas con más velocidad. Llegó a darle lecciones de guitarra incluso a su propio profesor de música… :)

A los 16 años conoció a su amigo Marty Friedman (ex guitarrista de Megadeath) quien con el tiempo se convertiría en uno de los guitarristas más importantes del mundo. Juntos llegaron a grabar cuatro discos e hicieron giras por Japón y Estados Unidos cosechando éxitos por su virtuosismo y su corta edad. Sus dedos eran ahora tan veloces como el viento de otoño. En 1989, a los 20 años, llega a tocar en la banda de David Lee Roth (el ex cantante de Van Halen), y el siguiente año recibe el premio al mejor nuevo guitarrista entre los lectores de la revista Guitar Magazine. Jasón amaba a su guitarra…

Un día, empezó a tener molestias en su pierna izquierda, una ligera cojera, así que fue al médico. Le diagnosticaron esclerosis lateral amiotrófica (ALS o la enfermedad de Lou Gehrig), y le dieron cinco años de vida. Su familia se desmoronó, pero él, en cambio, se dijo que tenía muchas cosas que hacer aún y continuó su ascenso hacia el sueño del niño que llevaba dentro. Mientras la debilidad se adueñaba de su cuerpo y sus manos empezaban a interpretar una temblorosa danza, grabó un disco con David Lee Roth que llegó a ser disco de oro y finalizó uno en solitario. Durante la grabación, en muchas ocasiones caía desplomado al suelo, y una de sus manos era sólo unos cuantos huesos inservibles.

Jason Becker seguía grabando canciones mediante teclados y ordenadores con una sola mano, pues la otra había quedado totalmente inutilizada. Su estado iba degenerando por momentos y llegó un punto en que tuvo que ser ingresado una larga temporada durante la cual tuvo una extraña revelación mística que cambió su vida. A partir de entonces y como él mismo cuenta, en los últimos cuatro años no sólo no ha empeorado sino que ha mejorado considerablemente: ¡Ha ganado 30 libras en peso y tres músculos! :) Jason Becker vive ahora postrado en una silla de ruedas, casi paralizado y asistido por máquinas, pero ha encontrado la paz en su interior.

Y como todo cuento, éste tiene su moraleja. Jason cuenta que una noche, cuando su debilidad ya era manifiesta, soñó que corría. Cuando despertó, olvidó que tenía aquella cojera y caminó con total normalidad hasta que a su mente volvió ese recuerdo y se desplomó. Eso le enseño que si tienes control sobre tu mente, puedes hacerlo todo. Yo añadiría algo más: si tienes sueños por cumplir nada puede impedirte que los consigas…

Fin (de momento)…

El actor cierra el tomo entre sus manos y se retira mientras el público piensa en lo terca que es a veces la vida tratando de ponernos zancadillas a cada paso…

Si queréis seguir el cuento podéis hacerlo en www.jasonbecker.com
Además en la sección de mp3 podéis encontrar dos canciones suyas: “Altitude”, en pleno esplendor de su carrera a los 19 años, y una versión de la conocida “When You Wish Upon A Star”, cuando la enfermedad empezaba a avanzar.


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